¿Qué es?
Esta afección cutánea genera la aparición de ronchas, granos y, en casos extremos, ampollas en zonas de la piel que se hayan expuesto a la luz solar. Se presentan en la cara, pecho, brazos y piernas, al ser las zonas más descubiertas en verano. Estas erupciones suelen aparecer en los primeros días de exposición solar y disminuyen con las siguientes exposiciones solares cuando la piel se broncea.
Este trastorno afecta a entre un 10 y 20 % de la población y lo suelen presentar personas entre los 30 y 40 años, aunque cada vez aparece antes debido al cambio en los hábitos de exposición solar.
¿Qué factores que influyen en la alergia solar?
Algunas de las reacciones dérmicas se producen cuando el sol actúa de activador de un segundo elemento. Pueden ser fármacos, cosméticos o fragancias aplicadas en la piel que, tras la exposición solar, generan un eccema que suele tardar unas horas en desaparecer.
Existen reacciones fototóxicas desencadenadas por la ingesta o aplicación de un medicamento que es fotosensible o por el uso de láser que pueden inducir a sensibilización al sol. Esto no se considera una alergia, ya que es una reacción provocada por el medicamento o láser.
Si surge una reacción, lo mejor es visitar al dermatólogo de confianza para que realice una valoración y exámenes físicos. En Dermoclinic llevamos años realizando estas valoraciones cutáneas.
¿Cómo se diagnostica?
Lo mejor es acudir a un dermatólogo para que pueda realizar un examen físico y concretar si de verdad es alergia al sol. Entre las pruebas están:
- Biopsia de piel, donde el médico extrae una muestra del tejido con la erupción para su posterior análisis.
- Análisis de sangre, se realiza un análisis sanguíneo.
- Fotopruebas, el dermatólogo expone ciertas zonas de la piel a distintas intensidades de ultravioleta A y B para examinar el nivel de reacción de la piel. En el caso de que presente ronchas, se considera una piel fotosensible y se debe seguir estudiando para conocer el nivel del trastorno.
También se deben descartar otras afecciones que pueden provocar reacciones dérmicas como:
- Fotosensibilidad química: la unión de ciertos productos químicos como medicamentos, cremas o perfumes con la luz solar genera una reacción cutánea.
- Erupción por lupus: afecta a distintos sistemas del cuerpo y uno de sus síntomas en la erupción con relieve en zonas expuestas al sol.
¿Cómo puedo tratarlo?
Existen diversos autocuidados para disminuir el picor, las ronchas o el malestar. Se recomienda:
- Crema contra el picor, cremas específicas que alivian el escozor.
- Antihistamínicos, que pueden reducir la amplitud de la reacción dérmica.
- Compresas o baños fríos, para reducir la inflamación.
- No tocar los sarpullidos ni ampollas para ayudar a la cicatrización y evitar las posibles infecciones
- Analgésicos, que disminuyen el dolor de las ronchas.
- Cubrir la máxima zona de piel posible para evitar la exposición solar. Además, se recomienda el uso de protección solar de amplio espectro, para frenar los rayos ultravioletas A y B, con un factor mínimo de 30.
En otros casos, se pueden utilizar técnicas que desensibilicen la piel a la exposición solar.